La ortodoncia invisible se basa en un sistema de alineadores transparentes que se colocan encajados en la sonrisa del paciente y que consiguen realizar los movimientos necesarios sobre ella para que esté armónica, alineada y sana.
Existen casos en los que estos alineadores invisibles van acompañados de unos pequeños botones de composite que se colocan en los dientes: los ataches dentales.
¿Quieres conocer qué conseguirían los ataches dentales en tu sonrisa? En Arce Clínica Dental te lo explicamos.
¿Cómo funcionan los ataches dentales?
Los ataches dentales son unos pequeños botones que se cementan sobre unos dientes determinados. Están fabricados con composite, una resina que tiene el mismo color que el esmalte dental, por lo que pasan desapercebidos al sonreír.
¿Su objetivo? Aumentar el agarre del alineador a unas piezas dentales específicas para poder realizar unos micromovimientos sobre esos dientes que los alineadores, por sí solos, no podrían hacerlos de una forma tan precisa.
¿Qué tipos de ataches dentales existen?
Cada atache tiene una función concreta dependiendo en qué diente se coloque y en qué zona de la pieza se cemente, pero podemos clasificarlos de forma general en dos tipos:
Ataches dentales pasivos
Estos ataches dentales no cumplen una función directamente en el diente en el que se colocan, sino que ayudan a que se realicen movimientos en el resto de las piezas dentales. Dentro de esta categoría encontramos dos tipos de atache:
- Ataches de sujeción del alineador. Sirven para que el alineador invisible permanezca bien sujeto en la sonrisa y pueda llevarse a cabo el tratamiento correctamente.
- Ataches de intrusión. Existen casos en los que un diente está más adelantado o elevado que las dos piezas colindantes. Cuando esto ocurre, se colocan ataches dentales en los dientes de los lados para que el diente que está mal posicionado se coloque.
Ataches dentales activos
Los ataches dentales activos sí que actúan directamente sobre el diente en el que van colocados y se utilizan en los siguientes casos:
- Rotación de los colmillos o caninos. Se colocan en estos dientes para rotarlos hacia su posición idónea.
- Ejercer un control radicular. Cuando la raíz del diente no está bien colocada o no está lo suficientemente enderezada, consiguen que se coloque en su sitio.
- Extrusión dental. Al contrario que en los ataches dentales activos, este tipo de botón sirve para corregir dientes extruidos, es decir, ligeramente más introducidos en la encía y que por su posición no se alinean con los dientes de sus laterales.
La elección de un tipo de atache dental u otro dependerá de las circunstancias del tratamiento del paciente, ya que cada sonrisa es especial y necesita unos movimientos únicos y personalizados.
Si quieres comenzar un tratamiento de ortodoncia invisible ven a visitarnos en nuestras clínicas de Villaverde y Latina (Madrid). Nuestro equipo de ortodoncistas valorará tu caso y podrá explicarte de forma más detallada cómo será el proceso de tu tratamiento y si será necesario o no colocar ataches dentales en tus dientes. ¡Pide cita!